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AMAR DESPUÉS DE AMAR

Cuando una relación de pareja con hijos acaba y los cónyuges se separan, comienza una etapa de post-divorcio que es la más larga y ardua tanto para la pareja como para los menores.

En esta etapa, es habitual que surjan nuevos conflictos, pues además de los inherentes a lo relacional y a la ruptura (rencor, sed de venganza, despecho, rabia, etc.) se suman otros propios del proceso de separación y de la configuración de la nueva vida familiar, es decir, acordar dónde vivirán los hijos/as, los reajustes económicos y la distribución de los tiempos con los niños/as, son aspectos con alto riesgo para el conflicto.

Sabemos que el amor sentimental y pasional de pareja ya no va a ser el motor para la resolución de los problemas, pero si es importante conservar otro tipo de amor, el amor de padres que, además de orientarse de padre/madre a hijo/a, debe también ser bidireccional entre los progenitores.

El amor de un padre o de una madre a los hijos implica querer al otro progenitor. Favorecer una relación basada en el respeto, en la cooperación, en la unión y en el apoyo mutuo, es como entendemos el amor en el post-divorcio, fundamental para el bienestar emocional de padres, madres, hijos e hijas.

El impacto del divorcio o la separación en la dinámica familiar es inevitable y las figuras más vulnerables son los niños y niñas. Según la etapa evolutiva pueden presentar problemas como conductas regresivas, cuadros depresivos, fracaso escolar y comportamientos de riesgo.

Para que el niño/a afronte de forma positiva las tareas evolutivas que por etapa vital le son propias, precisa de la presencia, del afecto y del apoyo de ambos progenitores, pues cada uno, está llamado a desempeñar roles complementarios, insustituibles, exclusivos y únicos, que favorezcan la óptima evolución de los menores. Asimismo, fomentar en los hijo/as la visión de unos padres unidos en lo parental, favorecerá que crezcan seguros y con modelos de referencia estables y positivos, aspecto fundamental para un adecuado desarrollo madurativo.

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